EN VIDA DE EDWARD BACH: el arte entre 1886 y 1936.
La filosofía en el modernismo anglosajón: La conquista de la felicidad (1930)
“La felicidad depende, sobre todo, de lo que podríamos llamar
un interés amistoso por las personas o las cosas.”
Bertrand Russell, huérfano y longevo, pacifista, filósofo, matemático, interesado en ética y religión. Apoyó el voto femenino, el control de la natalidad y el divorcio. En 1930, publica "La conquista de la felicidad", mientras Edward Bach dicta el "Cúrese a usted mismo" a Nora Weeks y da a luz "Algunas consideraciones fundamentales sobre la enfermedad y la curación".
En este libro que costa de dos partes, Russell vierte una serie de consejos respecto a lo que el individuo puede hacer para superar la infelicidad. En la primera, escribe sobre las causas de la infelicidad: la envidia, la competencia, el aburrimiento, la mala conciencia o el miedo a la opinión pública. En la segunda, sobre las causas de la felicidad: el afecto, la familia, el trabajo, el esfuerzo.
En el prólogo nos advierte del carácter de su ensayo: “ He escrito este libro con la creencia de que mucha gente desgraciada puede ser feliz a través de un esfuerzo hábilmente dirigido.”
Russell gustaba escuchar a Mozart. Incluyo una bellísima versión del Concierto para clarinete en Do mayor K622 Adagio, interpretada por Sabine Meyer al clarinete, y la batuta del maestro Claudio Abbado con la Orquesta Filarmónica de Berlín.
"He vivido en busca de una visión, tanto personal como social. La personal: cuidar lo que es noble, bello, y amable; permitir momentos de intuición para entregar sabiduría en los tiempos más mundanos. La social: ver en la imaginación la sociedad que debe ser creada, donde los individuos crecen libremente, y donde el odio, la codicia y la envidia mueren porque no hay nada que los sustente. Estas cosas, y el mundo, con todos sus horrores, me han dado fortaleza".
Bertrand Russell, Reflexiones en mi octogésimo cumpleaños.